11 de julio de 2013

Obituario, Rosa Martínez de Cabrera

 Obituario
Ana Dolores García

El pasado lunes 8 de julio ha fallecido en North Carolina, donde residía desde hace años, la Dra. Rosa Martínez Abaroa, Vda. de Cabrera, recordada y querida profesora de Lengua y Literatura Española del Instituto de Segunda Enseñanza  de Camagüey. Coincidentemente, ese mismo día en estas páginas de la Gaceta de Puerto Príncipe aparecía uno de sus más sentidos poemas: “Nadie se va del todo”, verdad etérea que hoy bien puede aplicarse a su propia autora.

Rosita Martínez, como cariñosamente era conocida por sus amistades y múltiples alumnos y exalumnos,  dedicó toda su vida a la enseñanza de la literatura. Poeta y maestra, deja una profunda e imborrable  huella en el historial de la cultura agramontina.  En su ciudad natal, además de su actividad educativa, colaboró ampliamente en la sociedad femenina Camagüey Tennis Club y prestó solícito apoyo a cualquier actividad cultural que se gestara en nuestra ciudad, como la Sociedad de Conciertos o el Cine Club.  Más aún,  fue alma y promotora de la sociedad cultural Lyceum de Camagüey, de corta vida al correr la misma suerte de todas las sociedades y agrupaciones a la llegada del gobierno castrista.

Marchó entonces al exilio donde continuó su labor docente con igual entusiasmo. Fue profesora de Español en el Bethesda High School en Bethesda, Maryland, y más tarde ejerció igual cátedra durante varios años en la Universidad de  New York en New Paltz. Fue allí donde organizó un Simposio sobre la obra de Gertrudis Gómez de Avellaneda que contó con la asistencia de numerosos profesores de Literatura Española en distintas Universidades y Centros de Estudios Superiores de los Estados Unidos. También como homenaje a La Avellaneda y en colaboración con la Dra. Gladys Zalvídar publicó un libro conmemorativo de aquel Simposio por el centenario de la muerte de la insigne escritora camagüeyana.

Luego de su jubilación residió por largo tiempo en el norte de Virginia, de donde pasó a vivir junto a la familia de su hermano Paulino Martínez en el estado de North Carolina y donde acaba de fallecer a la edad de 93 años.  Enviamos nuestra más sentida condolencia a su hermano Paulino y su esposa Nerina Sánchez, a sus sobrinos y demás familiares. Rosita Martínez se ha dormido en la esperanza y en la fe que siempre profesó en la Resurrección por Cristo: 

Nadie se va del todo, y adiós, ya sin sentido,
es palabra vacía que flota sin objeto.
Adiós, adiós, no digas, que si te escucha el viento
subirá en remolinos hasta tocar el cielo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Un escrito bueno y sentido. Rosita fue una persona excelente en todo sentido, me llamaba con frecuencia y siempre tuvo mucho interés en mis viajes a CubA. Ella ayudaba a una familia necesitada y me decía que eran parientes, después supe que no lo eran; pero si tuvieron una relación de cariño y agradecimiento. Te estoy echando de menos amiga mía ¡Descansa en paz!